Desesperado por volver a jugar
Se come las uñas, se agarra la cabeza y festeja cada jugada a favor de Talleres como un hincha más. Aunque su cara lo delata y no lo deja disimular ni un poquito, trata pero no puede, y mucho menos podrá cuando comience a hablar y a recordar su pasado. Es que las ganas de volver a pisar un estadio de fútbol a Emanuel Giménez, le brota hasta por los poros. Pero desgraciadamente y por esas cosas que tiene el fútbol. El ex volante central albiazul, hoy se encuentra en condición de jugador libre, sin club y se entrena con un preparador físico en forma particular.
En dialogo exclusivo, “Ema” o “Mencho” como le dicen sus más íntimos. Cuenta su presente, repasa sus salidas pocas claras de la institución y aguarda impaciente la apertura del libro de pases en junio para reinsertarse en algún equipo.
¿Porqué quedaste libre y sin club?
Ocurre que cuando llegó Ramaciotti, me dijo que me buscara club porque no me iba a tener en cuenta. No me convenció ninguna de las ofertas, y preferí quedarme a esperar hasta que se vaya el técnico. Pero la situación se hizo demasiado pesada y opte por irme yo antes que él.
¿Crees que influyó en algo tu pasado? Teniendo en cuenta que vos jugaste en Talleres y el dirigió Belgrano
No se. No creo que haya sido algo personal, o algo de clubes. Calculo que ha sido por gustos.
¿Pero no te dio explicaciones?
No, pero tampoco se las pedí. Porque así como no le pregunto cuando me pone, tampoco le voy a preguntar cuando me saca. Me dio bronca porque se que podría haber jugado. Estaba a la altura de las circunstancias, y lamentablemente hoy tengo que esperar 2 meses estando parado aguardando que se abra el libro de pases.
¿Cómo se dieron tus dos salidas de Talleres?
En la primera etapa, mi desvinculación estuvo ligada a que no llegamos a un acuerdo económico. Yo consideraba que por el rendimiento que había tenido, me merecía un buen y digno contrato debido a que los años anteriores jugaba por becas que eran realmente bajas. Después de haber jugado correctamente todo ese año, podía exigir algo acorde a mi desempeño. Y la segunda salida fue lo que le paso a todos, no solo a mí. Sino también a Diego Garay quien era el último ídolo de la institución. Vino Capitano y de la mano de Oste nos limpió.
Pero uno sabe que siempre ha hecho bien las cosas, conoce como se maneja la gente del club y ellos saben como soy. Por culpa de esa persona no me quedé.
¿Se puede entusiasmar la gente de Talleres con verte jugar de nuevo acá?
Si, que más quiero yo que volver a jugar en el club y estar en Córdoba con mi familia y seres querido. Encima ahora está todo bien organizado, se ha vuelto a jugar en la Boutique y uno no tiene que pensar en problemas extra futbolísticos como ocurría antes. Creo que seria lo ideal.
Ahora supongamos que viene Pérez con un contrato en blanco y te dice: “Giménez usted ponga las condiciones que yo quiero hacer uso de sus servicios” ¿Qué haces?
Creo que no iría. Si tuviera muy pero muy pocas chances de jugar a lo mejor lo pensaría.
¿Desde tu debut hasta hoy en que aspectos evolucionaste?
Uno va progresando en el tema de la experiencia mientras más partido juega. Por ahí antes era muy impulsivo, de hecho me comí un par de expulsiones por ser bastante calentón y con el paso del tiempo uno va controlando esas cosas. Ahora algo que no deje de hacer nunca es: correr, meter y tratar de jugar.
¿Creés que hoy por hoy la gente valora más tu estilo de juego. El de tirarse al piso y meter, que por sobre la técnica y la gambeta?
Si creo que si. La gente actualmente rescata eso, el meter y correr porque en definitiva siente que le estás devolviendo parte de la entrada que ha pagado. Sienten que de ese modo le retribuís el esfuerzo que le ha costado conseguir la plata para adquirirla. Entonces el hincha siempre aspira a que el jugador deje todo. Pero obviamente que a los que tienen buena gambeta son a los que hay que cuidarlos, tenerles un poquito más de paciencia y tratar de serles un poco más tolerante.
Ha muchos futbolista les sucede que cuando están en la gloria, le surgen “nuevos amigos” o les aparecen pariente que les eran totalmente desconocidos. ¿Te está pasando lo contrario ahora que no te toca jugar?
Si, pero por suerte yo tengo clara las cosas. Es verdad que cuando estas en la cima se te acercan todos, pero de esto que me esta pasando a mí uno aprende a valorar a quienes son los que realmente están siempre a tu lado. Que en definitiva es la familia y los verdaderos amigos, y no todo ese cholulaje que aparece alrededor. Es por ahí lo que le decimos y hablamos con “Chacho” (por Buffarini) y Matías (Quiroga) que ellos ahora están pasando por un buen momento, pero saben y se dan cuanta quienes son los que realmente se les acercan por interés o los que están siempre.
Un sueño
Poder volver a jugar ya, porque estoy desesperado. Volver a Talleres y ganar algo con la institución es otro. Luego jugar en la selección, y ser ídolo absoluto de la “T”. Ese último es una de las cosas que más anhelo.
Se come las uñas, se agarra la cabeza y festeja cada jugada a favor de Talleres como un hincha más. Aunque su cara lo delata y no lo deja disimular ni un poquito, trata pero no puede, y mucho menos podrá cuando comience a hablar y a recordar su pasado. Es que las ganas de volver a pisar un estadio de fútbol a Emanuel Giménez, le brota hasta por los poros. Pero desgraciadamente y por esas cosas que tiene el fútbol. El ex volante central albiazul, hoy se encuentra en condición de jugador libre, sin club y se entrena con un preparador físico en forma particular.
En dialogo exclusivo, “Ema” o “Mencho” como le dicen sus más íntimos. Cuenta su presente, repasa sus salidas pocas claras de la institución y aguarda impaciente la apertura del libro de pases en junio para reinsertarse en algún equipo.
¿Porqué quedaste libre y sin club?
Ocurre que cuando llegó Ramaciotti, me dijo que me buscara club porque no me iba a tener en cuenta. No me convenció ninguna de las ofertas, y preferí quedarme a esperar hasta que se vaya el técnico. Pero la situación se hizo demasiado pesada y opte por irme yo antes que él.
¿Crees que influyó en algo tu pasado? Teniendo en cuenta que vos jugaste en Talleres y el dirigió Belgrano
No se. No creo que haya sido algo personal, o algo de clubes. Calculo que ha sido por gustos.
¿Pero no te dio explicaciones?
No, pero tampoco se las pedí. Porque así como no le pregunto cuando me pone, tampoco le voy a preguntar cuando me saca. Me dio bronca porque se que podría haber jugado. Estaba a la altura de las circunstancias, y lamentablemente hoy tengo que esperar 2 meses estando parado aguardando que se abra el libro de pases.
¿Cómo se dieron tus dos salidas de Talleres?
En la primera etapa, mi desvinculación estuvo ligada a que no llegamos a un acuerdo económico. Yo consideraba que por el rendimiento que había tenido, me merecía un buen y digno contrato debido a que los años anteriores jugaba por becas que eran realmente bajas. Después de haber jugado correctamente todo ese año, podía exigir algo acorde a mi desempeño. Y la segunda salida fue lo que le paso a todos, no solo a mí. Sino también a Diego Garay quien era el último ídolo de la institución. Vino Capitano y de la mano de Oste nos limpió.
Pero uno sabe que siempre ha hecho bien las cosas, conoce como se maneja la gente del club y ellos saben como soy. Por culpa de esa persona no me quedé.
¿Se puede entusiasmar la gente de Talleres con verte jugar de nuevo acá?
Si, que más quiero yo que volver a jugar en el club y estar en Córdoba con mi familia y seres querido. Encima ahora está todo bien organizado, se ha vuelto a jugar en la Boutique y uno no tiene que pensar en problemas extra futbolísticos como ocurría antes. Creo que seria lo ideal.
Ahora supongamos que viene Pérez con un contrato en blanco y te dice: “Giménez usted ponga las condiciones que yo quiero hacer uso de sus servicios” ¿Qué haces?
Creo que no iría. Si tuviera muy pero muy pocas chances de jugar a lo mejor lo pensaría.
¿Desde tu debut hasta hoy en que aspectos evolucionaste?
Uno va progresando en el tema de la experiencia mientras más partido juega. Por ahí antes era muy impulsivo, de hecho me comí un par de expulsiones por ser bastante calentón y con el paso del tiempo uno va controlando esas cosas. Ahora algo que no deje de hacer nunca es: correr, meter y tratar de jugar.
¿Creés que hoy por hoy la gente valora más tu estilo de juego. El de tirarse al piso y meter, que por sobre la técnica y la gambeta?
Si creo que si. La gente actualmente rescata eso, el meter y correr porque en definitiva siente que le estás devolviendo parte de la entrada que ha pagado. Sienten que de ese modo le retribuís el esfuerzo que le ha costado conseguir la plata para adquirirla. Entonces el hincha siempre aspira a que el jugador deje todo. Pero obviamente que a los que tienen buena gambeta son a los que hay que cuidarlos, tenerles un poquito más de paciencia y tratar de serles un poco más tolerante.
Ha muchos futbolista les sucede que cuando están en la gloria, le surgen “nuevos amigos” o les aparecen pariente que les eran totalmente desconocidos. ¿Te está pasando lo contrario ahora que no te toca jugar?
Si, pero por suerte yo tengo clara las cosas. Es verdad que cuando estas en la cima se te acercan todos, pero de esto que me esta pasando a mí uno aprende a valorar a quienes son los que realmente están siempre a tu lado. Que en definitiva es la familia y los verdaderos amigos, y no todo ese cholulaje que aparece alrededor. Es por ahí lo que le decimos y hablamos con “Chacho” (por Buffarini) y Matías (Quiroga) que ellos ahora están pasando por un buen momento, pero saben y se dan cuanta quienes son los que realmente se les acercan por interés o los que están siempre.
Un sueño
Poder volver a jugar ya, porque estoy desesperado. Volver a Talleres y ganar algo con la institución es otro. Luego jugar en la selección, y ser ídolo absoluto de la “T”. Ese último es una de las cosas que más anhelo.
Por: Federico Flores
Encontrá mas de Emanuel Gimenez en :http://www.albiazul.com.ar/.../20061011gimenez2832.jpg
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