10 jul 2008

Entrevista a Alexander Viveros

Actualmente ya no integra más la plantilla albiazul, pero no más de una decena de partidos le bastaron para transformarse en idolo, genio y figura.
Amable, picaro, y con cara de bonachon. Al "gordo" como lo apodan sus compañeros, dificilmente se lo pueda ver de mal humor. Siempre está predispuesto para la firma, la foto o la nota de turno.





¿Cómo te autodefinís tanto fuera como dentro del campo de juego?

Fuera de la cancha soy una persona muy tranquila, amable y más vale tímido. Dentro del campo de juego bastante agresivo, completamente diferente a lo que soy afuera. Me incomoda mucho perder, me molesto mucho cuando esto sucede. Esa es la diferencia que tengo. Además fuera de una cancha soy muy alegre, con mis compañeros trato de pasarla bien, de disfrutar lo que hago. Soy un agradecido de Dios.

¿Cómo fue tu infancia?

Poseí una infancia bonita, de mucha alegría y siempre con una pelota. No tuve riquezas, pero tampoco nunca me falto nada. Siempre lo necesario para estar bien, tranquilo con mi familia y mis hermanos. A medida que fue pasando el tiempo fui ganando la necesidad de jugar a la pelota, de empezar a divertirme, pasar a un club deportivo como el Deportivo Cali. Y después de eso comenzar a realizar una carrera. En la cual hoy si me pongo a mirar hacia atrás, tengo que repetir lo que te dije anteriormente soy un agradecido de Dios.

¿Fuiste futbolista por elección o las circunstancias de la vida te llevaron a ejercer esta profesión?

No por elección, siempre quise jugar al fútbol pero mi ilusión era simplemente desempeñarme en el Deportivo Cali. Llegar alguna vez a ser jugador de esa institución. Por eso siempre digo que el de arriba me ha dado más de lo que yo pensaba. Porque fui jugador del Cali y también integre otros equipos grandes como Cruzeiro, Fluminense, Racing, Nantes de Francia, Boavista de Portugal, Grasshoper de Suiza, Talleres. Además fui el capitán del Cali y lo más grande que me pudo haber pasado fue haber integrado la selección de Colombia muchos años.

¿Es cierto que con Farid Camilo Mondragón en Colombia tienen un equipo de fútbol?

Yo tengo una escuela de fútbol que se llama “La Acade”. Se debe a un homenaje a lo bonito que pude vivir en Racing. Son los mismos colores y es todo prácticamente igual a cuando estuve allí. Porque tenía que hacerlo entre el Cali, que es el equipo que soy hincha y que es el que más quiero. Pero allá esta el Deportivo Cali, entonces preferí llevar y ponerle el nombre del otro club que quiero mucho.
Con respecto a Farid, él es un amigo mío de muchos años en la selección. También tiene una escuela y a medida que el camino nos va llevando nos vamos uniendo. Tratamos de tener algunos jugadores en común, además de una relación muy bonita la cual esperemos que cuando terminemos de jugar podamos plasmarla es una buena empresa.


Se acerca el final de torneo y la gente comienza a impacientarse con saber que jugador se va y quien se queda en la institución. ¿Que va a ser de Alexander Viveros?

Yo tengo el mismo deseo que tiene la gente, la cual me lo ha expresado, y a la cual le estoy muy agradecido; que es el de quedarme. Pero sabemos que todo se trata de negociaciones, de mirar haber como se terminan las cosas y de llegar a un acuerdo con el señor Ahumada.

Mencionas el cariño de la gente. Alguna vez habiendo jugado apenas 90 minutos. ¿Te ovacionaron tanto como lo hicieron los hinchas de Talleres?


He tenido ovaciones muy lindas. Pero la de Talleres es más especial, porque me brindaron la devoción desde el primer partido. Debido a eso cada vez que estoy en la cancha quiero ganar. Porque me satisfago mucho cuando salgo del campo y la afición me brinda ese cariño.
Entonces quisiere llegar a estar en un Talleres, que desde el primer partido hasta el último no se pelee el tema la promoción. Y Empezar de nuevo porque yo se que a un Talleres así es muy difícil que se le gane y más jugando en la Boutique.


¿Cómo está compuesta tu familia?

Mi familia está integrada prácticamente por la persona que mas quiero en mi vida; que es mi hija. Después está mi esposa Margarita, y mis hermanos Oscar y Jhony.

A los 30 años y habiendo jugado en equipos de todo el mundo. ¿Te queda algun sueño por cumplir?

Yo pienso que en el fútbol siempre se sueña con algunas cosas más. Personalmente a los más importantes los he cumplido, pero me quedan algunos por realizar. La esperanza de jugar un mundial y de disputar la UEFA Champions League. Son algunos sueños, que tengo y mientras siga jugando a la pelota nunca voy a dejar de anhelarlos.

¿Qué le ha pasado a Colombia en este último tiempo? Se han quedado en los últimos años sin mundiales.

Tuvimos una serie de errores que nos costaron la clasificación. Estuve para jugar dos mundiales y en ambos nos quedamos eliminados. Me dio mucha tristeza, pero como se dice esto es fútbol hay que asimilarlo y en este deporte nunca hay mucho tiempo para celebrar, ni para ponerse triste.
Siempre hay que laburar día a día, no te da tiempo para nada. Solamente cuando te retires, dispondrás del tiempo para recordar todas las anécdotas.


Un mensaje para el hincha de Talleres

Que les estoy sumamente agradecido. Gracias por el cariño que me han brindado y espero retribuírselos en estos últimos partidos. Siempre en la cancha voy a dejar todo para devolverle ese gran afecto que me dan, y que tengan la ilusión que Talleres dentro de muy poco va estar en primera.

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